El pequeño pueblo de 40 habitantes de Granada que consigue tener su primer bar-tienda de alimentos

Nov 20, 2025 | Noticias

Notáez llevaba muchos años sin tener un comercio de comestibles y un bar, pero una familia de Argentina los ha podido recuperar en las antiguas escuelas nacionales de la localidad.

Más vale tarde que nunca. El pueblo de Notáez, de cerca de 40 habitantes residentes de forma continua, desde hace poco tiempo ya tiene un bar-tienda bautizado con el nombre de ‘El que faltaba’ gracias a la iniciativa impulsada por Gabriel Castro y su madre Marta Orpi. Esta familia de Argentina trabajó antes en su tierra y después en Italia y Alicante. Más adelante, a través de Internet conocieron a un vecino de Notáez que les informó que en su pueblo una familia alquilaba una casa, y sin pensárselo dos veces se mudaron a este pintoresco y bello pueblecito de La Alpujarra perteneciente al municipio de Almegíjar.

Este establecimiento se ha convertido en un punto de encuentro de vecinos y visitantes. Muchas personas les dicen a Gabriel y a Marta que le han dado vida al pueblo. Notáez en otros tiempos fue famoso por sus dulceros, músicos de cuerda, como por ejemplo el ya desaparecido y recordado ‘El Chatillo de Notáez’ y troveros. Existe un dicho en este pueblo que dice: ‘Notáez, comerás si traes’. Ahora, eso se ha acabado gracias a esta familia de Argentina con raíces españolas y la gente que acuda a este lugar podrá comer si le apetece si tener que llevar los víveres consigo.

En Notáez supieron Gabriel y Marta que carecía de tienda de comestibles y bar desde hace muchos años y Gabriel, que es cocinero y tuvo una casa de comidas con su familia en Argentina, se animó y su madre también. Entonces decidieron abrir en el salón de las antiguas escuelas nacionales de Notáez, con el permiso del Ayuntamiento, presidido por Francisco Hidalgo, una tienda de comestibles y un bar donde se pueden también degustar exquisitos platos españoles y argentinos, predominando los asados. Marta es también una experta cocinera y le gusta mucho tejer. El croché le encanta. Además colabora con la Asociación de Mujeres Rurales de Notáez.

También, esta familia realiza de forma artesanal un surtido de mermeladas caseras, tartas, magdalenas, pan, etcétera. Ya se ha hecho muy famoso el cordero asado en al estilo argentino. Las empanadas gustan mucho. Este negocio, muy bien acondicionado, está abierto al público durante toda la semana. A Gabriel Castro, de 36 años de edad, también se le da muy bien la albañilería, trabajo que aprendió con su padre. También sabe trabajar en el campo. Su madre, que tiene 75 años que no aparenta, tuvo un puesto de artesanía durante 14 años en Mar del Plata de Argentina.

Notáez se encuentra en la pendiente del Cerro Herrería. En 1850 tenía 392 almas, 54 casas, un pósito con 82 fanegas de trigo, una pequeña plaza, dos fuentes de buen agua, destinada una de ellas para riego de bancales, una iglesia (que hace poco se ha restaurado), varias tabernillas y tiendecillas, manadas de ganado, burros, mulos, cerdos, gallinas, gallos, conejos, etcétera. Notáez se remonta a la prehistoria, con restos del Neolítico, aunque fue bajo el dominio árabe cuando adquirió su fisonomía actual. Tras la reconquista, la iglesia se construyó sobre una antigua mezquita entre 1548 y 1557.

Este pueblo sufrió los efectos de la rebelión de los moriscos en 1568, quedando despoblado y siendo repoblado posteriormente con campesinos de otras zonas de España. La agricultura ha sido tradicionalmente la base de su economía, con un legado romano en el sistema de regadío de acequias. Notáez conserva la arquitectura popular alpujarreña. Notáez ahora tiene una población censada de algo más de un centenar de habitantes. Una de sus calles está dedicada al recordado dibujante gráfico Paco Martín Morales, nacido en Almería. Su madre estuvo de maestra de escuela en este Notáez Su padre fue guardia civil. Esta excelente familia tenía casa y raíces en Almegíjar, donde también Martinmorales posee una calle, y su hermano, el famoso fotógrafo Ricardo, una casa y muchos amigos.